martes, 21 de mayo de 2019

El Real Ingenio de Segovia

La ceca de Segovia, es con diferencia, la casa de moneda más prestigiosa de todos los tiempos. Las monedas más valoradas del mundo de la numismática (salvando excepciones) surgieron en esta hermosa ciudad, de la cuál me siento orgulloso de haber nacido.

Una de las puertas de acceso, del Real Ingenio de Segovia, construida por Fernando VII.

Una fábrica, que ha sido rehabilitada, gracias sin dudarlo, a los esfuerzos que acometió, el maestro Glenn Murray, al frente de la Asociación de Amigos de la Casa de la Moneda de Segovia.

El turismo en Segovia, se alimenta sobre todo, por el sector hostelero, con su conocidos cochinillos, corderos lechales y ponches segovianos...

En cuanto a visitas con tintes culturales... la afluencia de gente, se deja ver en monumentos de buen empuje, como el Acueducto y el Alcázar. En otro orden de visitas, tenemos, la Catedral, y la Casa de Antonio Machado, la Judería Vieja con la zona amurallada y la Iglesia de La Veracruz... Apostaría por decir, que la Real Casa de la Moneda, es el lugar menos frecuentado.

Y ésto es así, porque tenemos una casta política, que hablando claro "Se la trae al pairo".

La excelente restauración que se realizó en este magnífico "monumento monetario" se quedó en el primer proceso planeado... en una buena rehabilitación sin la presencia museística.
Ruedas hidráulicas reconstruidas, del Real Ingenio de Segovia. 

La fase consecuentemente más importante, después de este saneado, la que se centra en la idiosincrasia de parecer o no, un museo, está completamente muerta.

Una Casa de Moneda como ésta, la primera que acuñó a molino hidráulico en España (más sobre acuñaciones a molino en época de Felipe IV), y de la que todo el mundo acogió como patrón, años después, debiera ser exaltada, pues sin duda, se lo merece.

Tendría que albergar, piezas de indudable valor histórico, constituyendo una fiel muestra de lo que en su día fue, y para ello, no habría mejor manera, que exibir las monedas y medallas que de allí salieron.

Ciertamente, no todo el mundo sabe de numismática, como no todo el mundo, conoce el cien por cien, de las disciplinas habidas y por haber... Un cierto problema de difusión, entorpece el conocimiento  de este edificio industrial. Es patente, la carente publicitación del Real Ingenio (labor, que sin embargo, intenta suplir la Oficina de Turismo de Segovia), que es de suma importancia para nuestra ciudad y para el resto de los visitantes.

No estamos hablando de cualquier ceca, sin desprestigiar a ninguna de ellas... Estamos hablando, de la Ceca más importante del Mundo, la Ceca, donde el dinero, emergía por primera vez, de una manera innovadora, para sufragar los gastos de la corona, de los nobles, de la pequeña burguesía...

En Segovia, que se sepa, hubo más de una ceca.

Una primera, de procedencia Romana. Con el as de Segovia, allá por el siglo I antes de Cristo, se establece por el momento, el primer documento escrito, en el que aparece la palabra Segovia.

Hoy en día, existen dos variantes del as. Una, datada en la mitad del siglo I antes de Cristo y la otra, sobre el primer cuarto del siglo I antes de Cristo.

La palabra "Segovia", se encuentra situada en el exergo de las monedas, bajo un jinete montado a caballo, cuyo arte postcede, a las acuñaciones de los denarios hibéricos, compartiendo una gran similitud.

En el anverso, se nos presenta un rostro mirando a derechas, sobre las letras C y L (que todavía no se han "descifrado").


As de Segovia. Primer documento escrito, hasta la fecha en el que aparece el nombre de la ciudad.

La segunda ceca, sí se tiene constancia de donde pudo estar ubicada, por un grabado firmado en 1565 por Antón Van De Wyngaerde (Antonio De Las Viñas), "pintor ordinario" (paisajista de ciudades) del rey Felipe II.

La Casa Vieja, se encontraba cerca del actual seminario de Segovia.

Fue creada bajo mandato de Enrique IV, en 1455, y continuó acuñando a martillo (no a molino), hasta el reinado de Carlos II... Aunque se sabe, que antes de este monarca y hasta el reinado de Fernando III, (ya acuñaron anteriormente, Alfonso VII y Juan I) se acuñó moneda en Segovia.

En dicha ciudad,  la calidad de estas monedas, fue el origen de ciertas disputas entre los comerciantes, que exigían una verdadera equiparación al resto de las monedas extranjeras, hechas con peor factura y menor valor intrínseco, pero de igual consideración nominal o extrínseca a los vellones castellanos.

Juan de Murillo, fue el primer tesorero de taller de la Casa Vieja de Segovia.

La  Ceca de Segovia, recibió los mismos privilegios que las casas de Sevilla y de Burgos... los 150 trabajadores que en ella se daban, estaban exentos de ciertas "normas sociales" ...

Ciertamente, el reinado de Enrique IV, resultó ser un periodo muy convulso, en cuanto a economía se refiere (falsificaciones, rechazo del vellón como forma de pago, moneda fiduciaria...) que se alargó en el tiempo, hasta la aparición de Felipe II.

Fue este rey, quien en un intento de mejorar la economía y erradicar las falsificaciones, y también sufragar los gastos de las consecuentes guerras, quien construyó la fábrica de moneda más avanzada de toda su época, con las mejores máquinas de acuñar (novedosas en su funcionamiento) ...adelantándose sin duda a su tiempo, y dejando patente, la formación de uno de los primeros edificios de producción industrial de todos los tiempos.


Blanca de Felipe II con marca de acueducto de doble arcada. Inédita.

En 1580, el archiduque Fernando de Austria, le invita a Felipe II a observar los nuevos ingenios.

Viaja el monarca hasta Alemania, concretamen hasta  Innsbruck, para ver con sus propios ojos el funcionamiento de estos nuevos ingenios, emergentes tanto en Francia como en la zona germana.
Los ingenios tuvieron bastante éxito en la Casa de Moneda de Hall, en Tirol, y ahora el monarca quería comprobar si harían lo mismo en España.


Se desestima, la opción, de construir una ceca para estas nuevas máquinas, en Madrid, debido al poco caudal del agua de sus ríos, que en la actual capital, transitan.

Se escoge la ciudad de acueducto, como lugar apropiado. Justo algo más arriba de donde se besan el río Eresma y el Clamores, encima de los cimientos de uno de los molinos de papel, de la zona de la Alameda, propiedad de Antonio de San Millán.

Felipe II, decide instalar su ceca allí, después de conseguir la propiedad del molino y de los terrenos adyacentes, por compra, por 10.000 ducados, a escasos metros del Monasterio del Parral.


Juan Herrera, reconocido arquitecto (artífice de "El Escorial" y la Catedral de Valladolid), cumple las labores encaminadas a levantar tan afamado edificio.

Es a partir del año 1583, cuando  empieza a detallarse el emplazamiento de la nueva Casa de la Moneda de Segovia.

En 1584, parece que la fábrica, está ultimada... En el proceso de fabricación, colaboran ingenieros alemanes, desplazados desde su tierra a Segovia.

Los ingenieros, tuvieron que sortear los problemas ocasionados por el río Eresma, creando una presa y cimentando con ahínco (debido al lodo patente) la nueva fábrica de moneda. y en es 1585, cuando se dan las últimas pinceladas y se abren las puertas a grandes lingotes de plata, para su primer laminado. Aún así, no será hasta 1586, cuando se empiecen las primeras acuñaciones oficiales.

Juan de Minjares, y Francisco De Ribera, acometían las órdenes de Herrera.
Aunque en 1587,  la construcción de la real fábrica de moneda segoviana, se da por terminada... Francisco de Miranda, seguirá ampliando el edificio hasta 1607. El aparejador Pedro de Brizuela, continuará realizando obras en el Real Ingenio, hasta 1616.


En 1592, Felipe II dicta unas ordenanzas, para el buen gobierno de la casa de la moneda.

Como rasgo distintivo de ceca, ya desde el periodo de los Reyes Católicos, se coloca la marca del acueducto, o de "la puente", como venía a denominarse años atrás. Evitando confusiones con la Ceca de Sevilla, que tiene como S, su marca identificativa.

A destacar en esta ceca, el excelentísimo trabajo del genio grabador Diego De Astor.


1 comentario:

  1. En cada reconstrucción, la historia cobra nueva vida. Mantener edificios es preservar legados. Más que estructuras, son testigos del tiempo que, con cuidado, se convierten en monumentos eternos que narran nuestra evolución arquitectónica y cultural

    ResponderEliminar

Aquí puedes comentar sobre la entrada