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martes, 18 de mayo de 2021

La prensa a volante... Y vídeo

La prensa volante, estableció ciertas mejoras en las acuñaciones, que se vieron enriquecidas, esencialmente en dos características:


1) Arte más realista. Se destaca la veracidad de los rostros de los monarcas. "Por primera vez", se constituyen rostros más fidedignos, que se reconocen fácilmente.

Aunque siempre se ha emparejado, el mejor realismo del arte de las piezas, con las acuñaciones por prensa de volante, tenemos que matizar, que siglos antes, mediante la acuñación a martillo, se consiguió un alto grado de realismo en las monedas... estas acuñaciones de antaño, en algunos casos, nada tienen que envidiar, a las posteriores formas de hacer moneda… no tenemos mas que ver, ejemplos impresionantes del periodo romano, donde los bustos de los emperadores parecen cobrar vida...

Rostro de Trajano de Dacio. De denario romano. Con Gran realismo.


2) La presentación de las monedas una vez acuñadas por prensa de volante, es plana. Se logra un avance a este respecto, ya que con las piezas acuñadas por Real Ingenio, los flanes gozaban de cierta curvatura.



Hasta hace relativamente poco tiempo, una de las prensas de acuñación del Real Ingenio de Segovia, se exhibía en el Alcázar de Segovia. Este fenomenal invento, era la joya de la Sala del Tesoro, de tan maravilloso castillo fortaleza.

Prensa a volante, del Real Ingenio de Segovia.


En el año 2015, el patronato del Alcázar, cedió la prensa de volante al Real Ingenio.

Esta prensa fue construida en Sevilla de 1735 y estuvo trabajando en la Real Fábrica de Moneda de Segovia a partir de 1772. La prensa acabó en el Álcázar de Segovia y volvió en el 2015 a su sede principal… a día de hoy, carece de los volantes superiores y del tornillo central.


En la Real Fábrica de Artillería de Sevilla, debido a la experiencia en fundición, para crear campanas y armamento militar... se produjeron parte de estas afamadas prensas de volante.

La diferencia en el proceso de acuñación en las prensas a volante, en relación a las labras por rodillos de laminación, es bien perceptible.

Si con los Reales Ingenios, las monedas eran recortadas de los rieles una vez ya habían sido acuñadas... con los volantes, los cospeles se separaban de los rieles y se acuñaban como se venía haciendo desde tiempos inmemoriales, a golpe de martillo.

En las monedas a volante, se establece una tercera cara de la moneda; el canto, que suele también labrarse con el denominado cordoncillo. Este elemento, cumplirá una doble función; adorno y limitación de cercenado de los cantos de las monedas.

Los primeros cordoncillos del Real Ingenio de Segovia, tendrán forma de laurel, y se realizarán a través de una máquina simple, pero innovadora, cuyo nombre es el de cerrilla.

La cerrila, básicamente se compone de dos soportes de metal horizontal, abiertos por el centro en toda su longitud. En este hueco, se ha labrado en negativo el cordoncillo que posteriormente será unido a la pieza… ni que decir tiene, que es del grosor del canto de la moneda. Uno de los soportes es fijo y el otro móvil. La moneda se coloca de canto, dentro de la hendidura y uno de los módulos de acero avanza paralelo al segundo, produciendo el arrastre de la moneda, al tiempo que se va grabando el canto gracias al paso por ambos soportes.


Una vez se establece el cordoncillo, ya se puede acuñar en la prensa a volante 


Vídeo



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