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miércoles, 27 de junio de 2018

Hemeroteca: Resellos en maravedís de busto de Felipe IV


Los resellos, en maravedís de busto de Felipe IV, suelen ser a veces auténticos y otras falsos.

Los falsarios, cogían normalmente, moneda "antigua" resellada y utilizaban el cospel para acuñar sus bustos y escudos de Felipe IV.  Otras, es de suponer, que cogían cospeles sobrantes de resellos hechos por ellos mismos en anteriores pragmáticas (falsos) y los empleaban para acuñar la nueva moneda.

En ambos casos, las acuñaciones de estos felipes son falsos, ya que la producción de estos nuevos maravedís son posteriores a los resellos que portan.

Los últimos resellos de Felipe IV tienen su límite en 1659...y las primeras acuñaciones de los maravedís con el busto del monarca, corresponden a 1660.

Por lo poco que he visto, creo que estos falsarios gustaban de coger monedas ya acuñadas en la fábrica del real ingenio (8 maravedís, 4 maravedís...) porque eran ya piezas con flanes circulares, aspecto importante para poder emular las mejoras en la acuñación a molino, con circunferencia de cospeles perfecta.

A su vez, es común que estos falsarios utilizaran monedas acuñadas a martillo para labrar encima, sus falsificaciones de busto. Y también es usual, que emplearan sus propias monedas con resellos falsos de épocas anteriores, para estos menesteres.

Queda claro, por todo ésto, que los falsarios rara vez fundían de nuevo las monedas para estampar los nuevos artes, y de una manera más práctica, se encargaban de reacuñar lo ya existente, ahorrando en esfuerzo  y en gastos ocasionados por la fundición de dichos metales.

Resello a VIII, seguramente de 1641 sobre moneda de real ingenio, reacuñada con busto y escudo de Felipe IV (falsa de época)



16 maravedís de Felipe IV. Falsa de época.
Con resello a VIII seguramente de 1641. Posible moneda original de 8 maravedís de Felipe III o IV (a martillo).
Ceca de Madrid.
1662




"19" maravedís de Felipe IV.
Falsa de época.
Ceca de Sevilla (se ve la marca de ensayador R, que correspondería a Rodrigo Fernández).
Acunada sobre resello del anagrama PVS/RX.
S de la leyenda invertido.

martes, 26 de junio de 2018

Algo sobre los falsarios

Ya, con la La Real Cédula del 31 de Diciembre de 1596 sobre la producción de vellón, hecha en el Real Ingenio de Segovia, se eliminó la liga de plata, convirtiendo los cospeles en metales solamente de cobre, argumentando que la plata vertida con anterioridad en este tipo de monedas, se perdía y en consecuencia se desaprovechaba, fenómeno que no es del todo cierto, pues en zonas como en los Países Bajos, los falsarios aprendieron a separar ambos metales y seleccionar el más noble para hacer confeccionar lingotes con ellos, aunque ésto se desarrolló en mayor medida con las acuñaciones de los cobres de 1660 a 1664.
En 1597 se volvió a acuñar vellón con liga de plata.
Las incipientes mejoras en la labra de moneda, gracias al nuevo Real Ingenio de Segovia, situado en el Valle de la Alameda, y edificado sobre un antiguo molino harinero, por mandato de Felipe II, a los pies del Río Eresma, desencadena que las acuñaciones a martillo, vayan dejando poco a poco paso a las de molino, dificultando así, las labores de los falsarios. Aunque éstos, siempre encontraban la manera y los recursos necesarios para emular las últimas tendencias y hacer circulante falso de la época. Ante tal circunstancia se tomaron soluciones duras, y "las penas se endurecieron respecto a épocas anteriores, además de convertir los delitos de falsificación y contrabando en delitos de (lesa majestad), castigados con la muerte a fuego, la pérdida de todos los bienes y la caída en desgracia de sus descendientes por dos generaciones"*

*
"El fraude monetario y la expansión...”, p. 51; Corpus legislativo…, p. 18

Con la llegada de Felipe IV al poder, la historia de España se vio envuelta en una serie de conflictos internacionales importantes, que tuvieron que ser rápidamente financiados. Felipe IV promulgó la pragmática del 14 de octubre de 1624, por la que se prohibía la extracción de oro y plata en moneda y en pasta, así como la introducción de moneda de vellón. Era a través de los puertos españoles y a veces bajo el "visto bueno" de la autoridad competente de estas zonas, donde se introducía moneda falsa a raudales (las penas a este respecto eran demoledoras: arder en la hoguera y los cómplices... a remar a galeras)

A partir de 1627, la inquisición toma parte en estos asuntos.

Antes de llevar a cabo una de las reformas monetarias más innovadoras (de 1660 al 64), en época de Felipe IV, las monedas pasaron por una serie de resellados importantes, que harían de ellas, un gran ejemplo fiduciario del sistema económico de entonces.

Tipos de resellos:

Felipe III

. Resello de 1603/6 a VIII y a IV maravedís sin marca de fecha.


Resello a IV de 1603 con ceca de Valladolid sobre un ochavo de Felipe II


Felipe IV

. Resello de 1635/6 a XII y  VI maravedís


. Resello de 1641/2 a XII, VIII y VI maravedís

Resellos falsos de VI y IV maravedís sobre cospel fundido.

. Resello de 1652/3 a 8 y a 4 maravedís


Resello a 8 de 1652 sobre VIII maravedís a martillo de Felipe III o IV


Resello a 8 de 1652 sobre moneda original de 8 maravedís de Felipe III del Real Ingenio de Segovia.


. Resello de 1654/5/6 resello a VIII y a IV maravedís


. Reacuñación y resello del anagrama PVS/RX de 1658/9 a IV y a II maravedís.



Hubo un tiempo en el que el propio Felipe IV prohibió toda moneda no resellada... obligando con ello, a que todo aquel que tuviera moneda sin "sello" de las pragmáticas nuevas, pasase por las casas de moneda pertinentes, para estampar fecha y valor...aunque los falsarios aprendieron rápido a resellar sus falsificaciones.

La cantidad de resellos que se iban sobreponiendo en los diferentes cospeles, hacían difícil su comprensión y su estampación, y facilitaban la labor de los falsarios.

Todo ésto, originó que en 1660 se acuñaran las primeras monedas de busto de Felipe IV sin liga de plata alguna, al principio. A partir del año 61 hasta el 64, se acuñó moneda con liga de plata y bajo el procedimiento de "molinos de sangre o agua" (máquinaria que funcionaba por la fuerza de las corrientes de agua o por tracción animal). Monedas mejor labradas y con cospeles más concéntricos, que auspiciaban un mejor futuro contra las falsificaciones. (Id a hemeroteca)

Pero lejos de conseguir ésto, se alcanzó el efecto contrario, hasta tal motivo, de que los falsarios, conociendo el porcentaje de liga de plata que tenían estos maravedís de busto, y sabiendo desligar estos metales, fabricaron moneda de cobre con un valor intrínseco, muy inferior al valor nominal, alcanzando grandes beneficios. Se falsificó muchísimo... La corona tuvo que permitir durante un tiempo el numerario falso y darlo por bueno.





Fuentes de apoyo consultadas:


FALSIFICACIÓN Y DELITO MONETARIO
EN LA MONARQUÍA HISPÁNICA DEL SIGLO XVII
Pablo Alfaro de la Hoz

domingo, 24 de junio de 2018

Las cecas en los felipes de busto

Diferentes cecas donde se produjeron las acuñaciones de los Felipes de Busto:


Con marcas de ensayador


Burgos





La Coruña





Códoba






Cuenca






Granada





Madrid





Segovia






Sevilla





Toledo







Trujillo










valladolid





sábado, 23 de junio de 2018

Características de las variantes de los maravedís de busto

Existen una serie de características identificativas, en las monedas, que nos dan la clave para saber qué tipo de variantes y de rarezas tienen.

Enumeraremos las más significativas en los Felipes de busto:

Leyendas:

Las leyendas tanto de anverso como de reverso pueden tener innumerables variantes.

- Diferentes acotaciones entre las palabras de las leyendas:

   Romboidales, flores, cruces, puntos, roeles...

- Acotación de palabras de las leyendas.

- Letras especulares, generalmente la N de Hispaniarvm. La letra S a veces aparece cerrada como un 8. Letras invertidas, como a veces aparece la V de Hispaniarvm.

- Corrección de cuños, notándose en este sentido unas letras encima de otras.

- Números de la fecha girados, normalmente el último dígito.

- Acotación de letras (como  la P) en el caso a veces de Philippvs en vez de Philippvs.

Otras variantes:

- valor a veces girado.

-Variantes por método de acuñación (a martillo y a molino)

- Variantes de arte en los bustos.

- Variantes en las cecas y en los ensayadores, y variante en sus acotaciones.

- Variantes de olra circular, a veces presente y otras no.

- Variante en la colocación de los castillos y leones del escudo del anverso.

- Variante en la presencia de flores de lis en el escudo.

Por último, variantes en el porcentaje de liga de plata.



4 maravedís de Felipe IV a molino, con ceca de trujillo de 1664. Ensayador, Martín de Macaya. Curiosa variante, con valor dentro del escudo. Colección del autor. 

jueves, 21 de junio de 2018

Variantes de busto no catalogados y sus falsas de época

Variantes de los maravedís de busto de Felipe IV no catalogados/ sus falsas de época.


      16 maravedís falsos de época. Cospel                  octogonal. Colección del autor


Felipes de busto 

 Durante el periodo de 1660 a 1664, Felipe IV establece una moneda de vellón nueva, "el Felipe de Busto". Las numerosas y diferentes pragmáticas anteriores, que originaron tanto circulante "farragoso", hizo imposible seguir con este cometido. Por una parte, los cospeles habían sufrido tanto la estampación de las fechas y valores que ya no soportaban más modificaciones. Por otra parte, las nuevas innovaciones en el campo de la acuñación, previsiblemente facilitaban la erradicación en el trabajo de los falsarios y presumiblemente, hacía posible, poder fabricar con ello, moneda nueva y menos fiduciaria que antaño (fenómeno absolutamente contrario a lo que pasó).

Los Felipes de busto han sido las monedas más falsificadas de la historia... hasta el rey en el último período, tuvo que considerarlas buenas, debido a la gran cantidad existente de falsificaciones. Los falsarios veían incrementadas sus ganancias al hacer las monedas sin liga de plata, difícilmente detectables, consiguiendo con ello que el valor nominal estuviese muy por encima del valor intrínseco del metal. Y no dudaban para tal cometido en tener que innovar y copiar aquellas máquinas a molino, necesarias para esta nueva etapa. En el desarrollo de estas copias, los falsarios eran cautos e intentaban no imitar los relieves de las monedas con gran exactitud, porque la pena se reducía en caso de que la autoridad competente les descubriese... aunque en la ceca de Sevilla y Madrid se realizaron verdaderas obras de arte a este respecto...y más de un falsario acabó en galeras o con más de 100 latigazos... E incluso la muerte.

Hoy por hoy, todavía existen innumerables variantes de estilo, de ceca, de valores y de fechas...los actuales y excelentes catálogos hechos al respecto (el de Tosiriano y Sanahuja) aún habiendo mejorado mucho el mundo de la numismática, no recogen en su totalidad aquellas variantes menos comunes que de vez en cuando nos encontramos.

16 maravedís (hemeroteca)











Leyendas Anverso: Hispaniarvm rex 1663 (N retrógrada) Marca de ceca M (Madrid) Ensayador S (Sebastián González de Castro) Marcas de ceca y ensayador acotadas por puntos. Valor 16 maravedís. Acotado por puntos. 6 tumbado. Reverso: +Philipps+IIII+D+G. (cruz dentro de círculo, entre leyendas). Busto de Felipe IV a Derechas.












  1. Leyendas Anverso: Hispaniarvm rex 1664 (N retrógrada) Marca de ceca M (Madrid) Ensayador Y (Ygnacio de PaYna) Valor 16 maravedís. Acotado por puntos. Reverso: +Philipps+IIII+D+G (cruces de malta como separadores). Busto de Felipe IV derechas.




Leyendas

Anverso: Hispaniarvm rex 1663 
Marca de ceca girones invertidos (Valladolid) 
Ensayador M (Francisco de la Montaña)
Marcas de ceca y ensayador acotadas por flores.
Valor 16 maravedís. Acotado por flores. 6 tumbado.

Reverso: +Philipps+IIII+D+G. (Flores entre leyendas). Rectificación de P sobre H.
Busto de Felipe IV derechas (posiblemente no catalogado)




16 maravedís de Felipe IV de 1664. (4 ligeramente girado)
Ceca de Madrid (Puerta de Alcalá)
Solo aparece en el catálogo de "Tosiriano"
Poco común.





16 maravedís de Felipe IV, ceca de Segovia de 1663. Inédita. Anverso A12, reverso R4 del catálogo de Sanahuja y Jarabo. Tipo 2. Acueducto exclusivo de tres arcadas. Ensayador Bernardo De Pedrera. Se descarta la falsificación de época, no sólo por el arte de la pieza, si no por la grafía de las leyendas.

miércoles, 20 de junio de 2018

8 maravedís (hemeroteca)









Leyendas Anverso: Hispaniarvm rex 1662 Marca de ceca M (Madrid) (M girada a izquierdas) Ensayador Y (Ygnacio de PaYna) Marcas de ceca y ensayador acotadas por puntos. Valor 8 maravedís. Acotado por puntos. Repinte de S en leyenda (Hispaniarvm) Reverso: +Philipps+IIII+D.G. (cruces de malta como separadores y puntos). Busto de Felipe IV derechas.











8 maravedís de Felipe IV. Ceca de Madrid.
Acuñada en la calle Segovia.
Ensayador Y (Ignacio de Payna)
Leyendas anverso: .hispaniarvm.rex.1662
Leyendas reverso: .philippvs.IIII.DG

lunes, 18 de junio de 2018

sábado, 16 de junio de 2018

Métodos de limpieza y conservación de monedas






Métodos válidos en la limpieza de monedas, protección y conservación.


















¿limpieza necesaria o simple capricho?

El primer impulso que suele sentir el coleccionista novato, es el de limpiar la moneda que adquiere. La apreciación que suele tener, equivocada normalmente, es la de querer dejar el metal inmaculado, brillante y libre de cualquier otro tipo de sustancia adherida, que previsiblemente perjudica el estado de conservación y belleza de la pieza...cuando ésto en ocasiones no es así. Así que, para no cometer el error de estropear una moneda y que pierda su consecuente valor numismático, tendremos que diferenciar entre lo que es una moneda sucia y una moneda con característica propias que deben o no ser tratadas para una mejor comprensión del campo y las leyendas y en definitiva, de la historia que encierra esta pequeña joya en sí misma. Una vez sepamos que la moneda necesita limpieza, tendremos que conocer qué métodos son los más adecuados para el tratamiento de la misma. Estos varían dependiendo del tipo de metal de la pieza, del estado de conservación, circulación y acuñación. Después de la limpieza, las monedas deben en muchos casos cubrirse con una fina película protrectora y guardarse con materiales aptos para su posterior conservación.

Diferentes utensilios de limpieza





Monedas terrosas

 Existen diversos métodos en el tratamiento de estas piezas. Hay veces que la tierra queda bien en la moneda e incluso la protege. A veces, está entre medias de las leyendas y el campo y crea un contraste muy atractivo. ¿cómo saber entonces si dejar la moneda limpia del todo o con ciertos resquicios de tierra? Pues depende de qué gustos posea cada uno y evidentemente de lo que le venga mejor a la moneda. En monedas de cobre o bronce con tierra, lo primero que hay que hacer es ponerlas en contacto con agua (preferiblemente agua destilada) y suavemente pasar el dedo pulgar por encima del cospel sin hacer mucha presión (por si hubiese un grano de arena duro suelto y pudiera rayar el cospel) Luego, se frotará la moneda entre los dedos ya con más fuerza y se aclarará con abundante agua. La secaremos poco después, con una gamuza. Si sigue con tierra la moneda, pasaremos un cepillo de dientes con las cerdas cortadas por la mitad ayudándonos de jabón neutro. Frotamos sin miedo y con decisión para eliminar la tierra más adherida. Si aún así sigue la tierra pegada, tenemos dos métodos para retirarla.

  Primer método:

 Mediante inmersión de la moneda en agua destilada y cepillado diario de la misma. El agua templada o caliente. Hay que repetir este proceso varias veces al día durante uno o dos meses...a veces la tierra sigue sin salir. Este proceso es completamente inofensivo para la moneda, pero se dilata mucho en el tiempo.

  Segundo método:

 Cogeremos un palillo de dientes y masticaremos la punta hasta suavizarla. Después utilizaremos el palillo para sacar la arena incrustrada. Es conveniente usar un pincel de cerdas blandas para ir retirando el polvillo de la moneda según vamos limpiando y así ir viendo como avanza la limpieza de la pieza. A veces con el palillo no es suficiente, es el momento de utilizar otros utensilios más duros. Para estos cometidos están la lana de acero (del 00, 000, 0000) los lapices de lana de acero, los cutter, el punzón de dentista y los bolígrafos de fibra de vídreo...cada uno tiene sus ventajas e inconvenientes y lo mejor es ir combinándolos en base a las necesidades de cada moneda... En ocasiones la lana de acero se moja con agua para evitar rayar piezas con poco relieve...y se presiona más o menos la pieza, según como esté la pátina o la cantidad de tierra que tenga y su dureza. Otras veces se utiliza el cutter para quitar el exceso de tierra escondida recónditamente, entre los relieves del circulante, con sumo cuidado de no rayar la pátina de la moneda. El punzón, normalmente se utiliza con la punta paralela a la moneda para no dañarla. Hay gente que utiliza "dremel" para monedas con tierra muy adherida o con principio de cáncer, hay otros que utilizan la electrólisis para retirar cantidades ingentes de incrustaciones terrosas o marinas...poco a poco iremos concretando en los temas. En este blog se darán entradas de temas relacionados con la limpieza, almacenaje y conservación de las monedas, pero también está concebido para que la gente partícipe y ponga sus diversos métodos, para comentar y para opinar, para ayudar y para corregir...introduciendo fotos y escritos sobre numismática en relacion a estos temas.

 

La pátina 

La pátina de la moneda, es la oxidación controlada, del metal que contiene la moneda, que se deposita en la parte superior de la misma y que se forma a lo largo de los años. Ésta capa protege la pieza en el devenir del tiempo y puede coger diversas tonalidádes y cristalizaciones, que hacen de ella, una verdadera delicatessen en el mundo de la numismática. Así, la pátina protege a la moneda y por ello no es saludable retirarla, a parte de que ella misma, por si sola, tiene un valor histórico importante, pues acompaña a la pieza desde su concepción en el transcurso del tiempo. En circunstancias, nos encontraremos pátinas muy distintas en monedas muy parecidas, que ya sólo por tener esa variedad de colores y texturas, pueden influenciarnos en un cambio en la apreciación numismática que tenemos sobre la pieza, e incluso en el valor económico de ellas. Cuando la pátina es inestable, la oxidación se descontrola y surgen los problemas...en este caso, hay que tratar la pátina para evitar que la moneda poco a poco se destruya...surge el conocido cáncer de cobre, la moneda se destabiliza y empieza a corroerse, hasta el punto a veces de convertirse en polvo. En ciertos países, como en Estados Unidos , las pátinas (sobre todo en monedas de plata) casi roban el protagonismo numismático (valor facial, fecha, ceca...) a las monedas que las portan. La pátina es un claro referente de la salud de la moneda, que embellece a la misma y la aporta valor. Respetémosla. ¡intentemos no quitarle la pátina a las monedas, salvo cuando sea estrictamente necesario!




Cáncer de Cobre 

El cáncer de cobre surje como la consecuente degradación que nace en algunas monedas, debido a la alteración que sufren los cloruros del cobre, cuando la moneda está en contacto con el oxígeno y la humedad. En dichos casos, la pátina se desestabiliza dando lugar a la aparición de manchas verdes y alimonadas, con el consiguiente polvillo, que va comiéndose literalmente las piezas al transcurso del paso del tiempo. El cobre, dese sus orígenes, busca volver a su estado primitivo y la naturaleza lo provee de una capa protectora llamada pátina. Cuando las sales de cobre que se forman en la moneda son inestables, la pátina da paso al cáncer de cobre. Algunos componentes del cobre, son, el óxido cuproso (rojo) carbonato de cobre (azulado) sulfato de cobre (verdoso) y acetato de cobre (verdoso). Si el cobre segrega ácido clorhídrico como consecuencia de la inestabilidad de la pátina en contacto con la humedad y el oxigeno, produce inmediatamente el temido cáncer de cobre. No hay que confundir entre cáncer de cobre y cloruros verdes o concentraciones, que pueda tener la moneda, por haber estado guardada en sobres de plástico. Para finalizar, diremos que en ocasiones determinadas, será necesario reproducir la pátina de la moneda o medalla de manera artificial mediante compuestos químicos. Esta pátina artificial es necesaria para proteger el metal. También podemos acelerar el proceso del restablecimiento de la pátina, siguiendo el curso natural que tomaría la moneda con el transcurrir del tiempo...ya hablaremos en el blog de diferentes métodos. Otras, simplemente esperaremos a que la pátina vaya surgiendo (siempre con vigilancia de las piezas) este último caso es el más natural y largo...y es el que da como consecuencia, la aparición de la conocida "pátina de monetario".

 Fuente visitada: Wikipedia












Ceras y compuestos protectores de monedas

   Cuando una moneda ha sido tratada por el conocido cáncer de cóbre, lo aconsejable es untarle de una ligera capa de esta serie de productos, para evitar que la pátina decaiga y vuelva a enfermar. Los poros de la moneda están ahora abiertos y es aconsejable protegerlos. Imaginemos que como le hemos quitado parte de su piel a la moneda, ahora es necesario fabricarle una. En otros casos, tales compuestos pueden servirnos para embellecer la pátina y que se vean mejor los relieves. También tendremos que tener en cuenta, una vez impregnada la moneda, que no todos estos compuestos se retiran de la misma manera. Personalmente, soy partidario de cubrir las monedas (no todas y depende del caso) con estas sustancias y la experiencia y el tiempo por ahora han demostrado que ciertamente son un baluarte seguro para preservar nuestras monedas.

 Empezaremos a enumerar diferentes compuestos:

  Vaselina

Esta sustancia que se puede encontrar en forma de crema o pomada, es muy útil para proferir resaltar relieves en la moneda. Se aplica con los dedos, frotando toda la superfucie de la moneda y se tiene que procurar, dejar un fina capa, sólo de este producto...quitaremos el resto si es necesario con un trapito. El efecto del brillo en la moneda es inmediato. El inconveniente es que hay monedas a las que el brillo les viene muy mal visualmente y por otro lado, en piezas terrosas, la tierra, valga la redundancia, adquiere un color mojado que a veces queda mejor o peor, dependiendo de la pieza que queramos tratar. Para retirar la vaselina nos bastará sumerjirla en agua caliente (preferiblemente destilada) y frotar con cepillo de dientes. El inconveniente es que si la moneda posee restos de tierra, ésta se empapará de vaselina y es difícil que vuelva a coger su color natural una vez intentemos quitársela. En monedas proclives a tener una pátina menos estable, es mejor utilizar otros métodos para su protección.

  Aceite

 Algunas monedas se impregnan de aceite (de oliva y aceite de motor) y a continuación se secan con un paño. El aceite suele oscurecer la moneda, se utiliza a veces para patinar las monedas e incluso para despatinar. No olvidemos que el aceite de oliva tiene ácido y como tal, puede retirar parte de la pátina de la moneda. Personalmente es un método con el que no estaría contento.

  Crema hidratante

 Hay gente que utiliza este tipo de cremas para preservar las monedas. El procedimiento es el mismo que si la empleáramos con nuestra piel.

  Aceite de parafina incoloro 

Es un aceite formado por macro cristales. Se puede comprar en farmacias. Se sumerje la moneda en este liquido y se retira la parafina sobrante con un bastoncillo de algodón. Es uno de los métodos más fiables e inocuos para preservar el estado de la moneda. Se puede retirar con cloroformo, etanol o acetona.

  Cera vírgen de abeja

  Se calienta la moneda y se cubre con este tipo de producto. Se retira calentando un poco el cospel y con un trapo. Da buenos resultados.

  Cera micro cristalina

  Es una cera compuesta por microcristales. Para mi, es la más recomendable. Se unta toda la moneda con este compuesto y se deja secar al aire. Se puede dejar mate, o sacar lustre con un trapo a modo de zapatero remendón. La gran ventaja de esta sustancia es, que preservará la aparición del cáncer ...y cualquier otro agente externo se verá frenado. La diferencia que tiene con la vaselina, es que después de utilizarla y dejar que se seque, la moneda coge el mismo tono que tenía con anterioridad, a pesar de que el cospel tenga partes terrosas. En ocasiones, puede sacársela brillo, dependiendo del carácter de la pieza. El inconveniente es que para retirarla hay que calentar mucho el cospel.
 La más empleada y con excelentes resultados es la cera RENAISSANCE WAX ®. La utilizan en museos ingleses para preservar piezas de metal.
Vídeo sobre la protección de un ochavo con cera microcristalina.

  Lacas

Hay que ser una verdadero experto para este tipo de producto. Yo no las recomendaría.

  Limpieza de medallas y monedas con cáncer de cobre

 En monedas con cáncer de cobre hay que examinar en qué proceso de degradación está la moneda. Si la pieza sólo posee puntitos superficiales, se puede con mucho cuidado raspar con una aguja o cutter... hasta eliminar el verdín. Con monedas con bastante concentración de cáncer, hay que procurar sumergir la pieza en agua destilada durante uno o dos meses, con ello conseguimos paralizar el efecto de inestabilidad de la pátina, puesto que los cloruros paralizan su acción de corrosión.

El proceso consiste en sacarla todos los días del agua, varias veces y limpiarla con cepillo de dientes. Una vez al día se cambia el agua destilada. En un período de tiempo extenso, uno o dos meses podemos conseguir eliminar gran parte del verdín...pero aunque ésto no funcionase, por lo menos habríamos conseguido estabilizar el proceso de corrosión del cospel. El siguiente paso después de esta periodicidad, es intentar quitar todo el cáncer posible a través de la lana de acero, un punzón...o cualquier otro método...pero sin dañar en nada la pátina de la moneda...si ésto no es posible, por las peculiaridades que tenga el cospel, es mejor no tocar la pieza. Después de todo ello, introduciremos la moneda en el horno, calentado a 200 grados durante 10 minutos, y observaremos como va desapareciendo el dichoso verdín...a veces, la moneda suelta en forma de tierrecilla esta degradación (no nos asustemos). Iremos observando la moneda cada 5 minutos y cuando veamos que ha desaparecido el cáncer, la sacaremos (ojo, que quema) y la dejaremos enfríar al aire o la sumergiremos en agua destilada. El proceso que viene a continuación, es cepillar la pieza con cepillo de dientes y jabón neutro, aclararla, secarla y darla una capa protectora, preferiblemente de cera micro cristalina. La pátina se puede obscurecer con el proceso y depende del tipo de moneda que sea, puede coger uno u otro tono. En otros casos, pueden efectuarse otros métodos más destructivos, porque tienen como función, eliminar la pátina.

  Electrólisis

El planteamiento práctico de la electrólisis es, mediante polaridades, desprender las incrustaciones que posee el metal...toda la suciedad y si nos descuidamos, toda la pátina. El procedimiento es coger un cargador (por ejemplo de móvil) y cortar el cable. Pelarlo y conectarlo a dos pinzas metálicas. Se llena un recipiente de agua y se echa sal marina, se remueve y a continuación se introduce una de las pinzas del cargador con la moneda anclada a ella y la otra pinza con cualquier otro tipo de hierro. Al conectar el cargador, la corriente empieza a realizar su cometido. Si están bien puestas las polaridades, se va desprendiendo el metal no deseado de la moneda y emigra al metal que hayamos puesto en el otro extremo. Hay que tener cuidado con los tiempos, pues podemos quemar la moneda. Normalmente este método es válido para monedas con una incrustación tal, que es imposible casi limpiar de otra forma, salvo con ácidos. La pátina desaparece por completo, por lo que nos tocará después repatinar la pieza. yo he observado verdaderas limpiezas con este método en monedas de plata con incrustaciones marinas. Después de tres sesiones de casi 8 horas diarias cada una, he visto quitar todo este parásito que se junta a la moneda y ver una bonita pátina, como resultado de este tipo de acción. Yo solo recomendaría este método para monedas que ya "no podamos salvar" Hace tiempo, las monedas de cobre eran utilizadas como arras en celebraciones religiosas. Pero éstas, habían sido cubiertas por un baño de plata u oro.

El procedimiento es el mismo que hemos descrito en esta entrada, salvo que el cambio de polaridades era evidente. Es decir, en un extremo de la pinza se colocaba la moneda de cobre o bronce, y en el otro extremo un trozo de plata u oro, se conseguía así que el metal más noble se desprenda y cubra la moneda.

  Limpieza de monedas de plata

  En monedas de plata con brillo original, es preferible simplemente lavarlas con agua y jabón neutro, y mediante los dedos. En monedas de plata que no tengan esta peculiaridad, es preferible sumergirlas en agua caliente y cepillarlas (con cuidado de no rayar las) con cepillo de dientes, una y otra vez. A veces la roña no sale, y tendremos que repetir el proceso varias veces. Siempre, de todas maneras es mejor dejar la moneda sin limpiar, si no sabemos aplicar otro método, pues para eso ya habrá tiempo. A veces las monedas de plata poseen unos puntitos verdes como resultado de la oxidación de los metales menos nobles que están aleados con ella. En este caso puede utilizarse un pequeño palillo de dientes o alfiler, siempre horizontal al cospel de la moneda y con sumo cuidado de no dañarla (hay que tener paciencia y pulso). Nos viene bien en este momento una lupa de bastantes aumentos para ver qué grosor de aguja, alfiler utilizaremos, o cutter...y seguir la limpieza en directo. A veces, si no es una oxidación inestable, es mejor dejarla tal cual...es el caso de monedas que han estado metidas en plásticos durante años ya e ham formado unos pequeños cloruros, de un verde más obscuro. Otro método es, con un bastoncillo de algodón (de "los oídos") impregnado en zumo de limón, frotar solo en el sitio donde está dicha mancha verde, con cuidado de solo actuar en ese punto. Cuando la moneda presenta una costra negruza, nos viene bien introducirla en zumo de limón. Se forra un recipiente con papel de aluminio y se vierta zumo de limón natural y una cucharada grande de sal. Se remueve y se introduce la moneda unos minutos. Se va sacando y vamos observando poco a poco como suelta la costra. Importante: se saca la moneda y se cepilla con cepillo de dientes y jabón neutro, aclarando con agua...así hasta conseguir el punto deseado. A veces este método sirve también para eliminar suciedad y tierra, o ennegrecimiento exagerado del cospel ( que no costra) si se utilizan bien los tiempos, el tono de la pátina se conservará.

  Goma de Borrar

Se utiliza sobre todo para crear contrastes y destacar leyendas o grabados de la moneda. Como la goma no llega a los recodos más recónditos, se produce un contraste entre pátina obscura y pátina más brillante. En las monedas con conservación proof o espejo, la goma de borrar puede formar micro arañazos, así que no es recomendable.

  Repatinado con atmósfera de amoniaco en monedas de cobre o bronce

 Cogemos un frasco y vertemos amoniaco puro. Cuidado de hacerlo en sitio ventilado. Atamos la moneda a un hilo y la dejamos colgando dentro del bote, sin tocar el amoniaco. Cerramos la tapa y solo con los vapores del amoniaco, la moneda se va repatinando. Normalmente, y dependiendo del amoniaco y del metal que sea, la pátina coge unos tonos u otros. Sacaremos la moneda (el tiempo hay que vigilarlo, pero a veces es bueno tenerla 24 horas...). Con un mechero, a pocos centímetros, prendemos fuego, para que se evaporen los gases del amoniaco que si no seguirían haciendo su efecto... cera protectora y listo. Las pátinas suelen salir obscuras, a veces verdosas, amarronadas, e incluso con tonos azulados y rojizos.

Almacenaje y conservación de monedas

Sobres de plástico

  Hay tantos sobres como fabricantes...siempre recogeremos los mejores productos y es conveniente, utilizar materiales que hayan sido creados sólo para este fin numismático. Ventajas: los sobres nos dan facilidad a la hora de poder observar las monedas, favoreciendonos la extracción de las mismas cuando queramos. Pueden introducirse cartones con las indicaciones que observemos pertinentes para catalogar nuestras piezas y a su vez, gozan de poder ser almacenados dentro de cajitas o "folios de plástico" para estar mejor organizados. Inconvenientes: muchos sobres de plásticos, generan en metales menos nobles, el temido cáncer de cobre.









Clasificafores de plástico 

Los clasificadores de plástico para monedas, Son una buena solución para guardar monedas de forma ordenada. A parte estos clasificadores u hojas de plástico, pueden perfectamente almacenarse dentro de clasificadores de anillas. Existen diversos tipo de "folios de plástico" para moneda...con sus respectivos espacios y tamaños de almacenaje. Algunos admiten poder introducir las monedas dentro de sus cartones y otros solo dejan que el cospel pueda entrar en esos huecos. Ventajas: forma rápida y barata en el almacenaje de monedas y de gran versatilidad entendida desde el punto de vista del espacio. Inconvenientes: si se introducen los "folios" después en clasificadores, hay que tener cuidado de que no se venzan, pues a más plásticos mayor peso. A la larga este tipo de plásticos, puede generar corrosión en el cospel, así que no hay que escatimar gastos en la calidad de materiales, siempre buscando los más aptos.

  Cartones para monedas

Estos cartones se venden en el mercado en grandes cantidades y también difieren en calidades unos de otros dependiendo de los fabricantes que los generan. Están los que dejan la posibilidad de ser cerrados por grapas y los que se pegan directamente. Tendremos que recoger aquellos cartones que posean plásticos adecuados para la conservación de la moneda (estos plásticos) generalmente son más correctos que los que conforman los sobres de plástico. En lugares húmedos, observaremos las grapas (es buen indicativo para vigilar las monedas, pues en caso de estar oxidadas, nos avisarán del grado de humedad que tenemos en nuestra sala de "conservación") Ventajas: precio ajustado en la compra de los cartones, posibilidad de escribir encima de ellos las anotaciones pertinentes, facilidad en el almacenaje de los mismos. Inconvenientes: a veces, dependiendo de donde se coloquen las grapas, nos será difícil extraer la moneda sin romper el cartón.










Cápsulas de plástico duro

 Existen de diferentes tamaños (cuadradas y redondas) y grosores, con espuma o anillos concéntricos de goma. Ventajas Son una buena alternativa para hacer lucir nuestras piezas más importantes. Defienden a las monedas de golpes y arañazos. Inconvenientes El precio de las cápsulas es bastante alto comparado con otros materiales. Ocupan mucho espacio y son más difíciles de almacenar, cabiendo también, menos piezas en diferentes tipos de organizadores. Frenan la formación de la conocida pátina de monetario.










Vídeo sobre medalla de Don Blas de Lezo dentro de cápsula.

Bandejas

 Las bandejas con materiales óptimos para la conservación de las monedas, poseen diferentes espacios. Estos pueden albergar monedas directamente a " pelo" u otros soportes (cápsulas,cartones...)con sus piezas dentro. Ventajas Las monedas lucen muchísimo y están muy bien organizadas. Caben muchas monedas en cada bandeja. Inconvenientes En caso de caída (si las monedas van a "pelo") las piezas podrían dañarse. Son soportes de precio más alto. Ocupan espacio, aunque bien es cierto, que caben muchas monedas.