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miércoles, 15 de diciembre de 2021

Regalías de Isabel La Católica

 Las desavenencias generadas entre Enrique IV y su hermanastra, Isabel la Católica, parece que tuvieron un descanso en los conocidos "Pactos de Guisando".

Había detractores de Enrique, que apoyaban a la princesa Isabel como futura reina heredera, en contra de la aceptación, de que Juana de Castilla, también apodada bajo el sobrenombre de "La Beltraneja", hija del monarca, siguiese su línea sucesoria.

Los rumores de impotencia del Rey unidos a la consideración de su hija Juana como bastarda, concebida supuestamente, de la relación entre el valido Beltrán de la Cueva y la mujer de Enrique IV, Juana de Avís, aceleraron la firma de un tratado entre ambos hermanastros que cambiaría el rumbo de la historia de España y de toda América.


En 1468 se firman los "Pactos de Guisando" en el Tiemblo, en Ávila.

Como elemento primordial del acuerdo, Enrique,  nombra a Isabel, princesa heredera del Reino de Castilla.


Pero bajo una máxima importante, siempre que se disponga el casamiento de Isabel, con aquella persona que él decida.

Aunque la reina también gozaba de su "coletilla": que más o menos decía así: "Si yo lo quiero".

Cuando Isabel se casa con Fernando de Aragón, a espaldas de la opinión de Enrique IV, éste decide intentar romper el pacto y considerar a su hija, Juana, como la máxima heredera... quitándole este privilegio a su hermanastra.

Isabel, echando mano del clero, sigue adelante y usa una de sus regalías: centrada en la potestad de acuñar moneda.


Blanca de Rombo de Enrique IV de la ceca de Ávila, con contramarca "P" de la Princesa Isabel La Católica.


Esta pieza que os presento, está acuñada en ese periodo de tiempo tan convulso. Isabel aprovecha su posición, y deja su marca "P" de princesa de Castilla, en el anverso de esta blanca de rombo de la ceca de Ávila.

Hoy en día, hay diversos signos para aludir a Isabel dentro de estas blancas de rombo de Enrique IV... Todos impresos en el cospel en forma de contramarca:

. P

. Estrella

. I coronada 

La moneda en cuestión, también destaca por el adorno de cuatro puntos en cada una de las caras del rombo... Que bien podrían ser marcas del platero que elaboró la pieza, ya que hasta la pragmática de Medina del Campo, no se utilizará la terminología aplicada a los ensayadores.


Son monedas raras de encontrar en el mercado y con un coste considerable, aunque en ocasiones puedes tener suerte y hacer con una a buen precio.

Os dejo el siguiente vídeo para que admiréis la pieza.